EL ADIÓS A OTRO GRANDE DEL CINE CON VECINOS
“CACHO” SE FUE DE RODAJE
En casi todas las películas del “Cine con Vecinos” de Saladillo está su figura, su “prestancia” como decía él, nuestro querido amigo Miguel “Cacho” Salinardi. Casi un actor del neorrealismo italiano, pero contemporáneo. Que le tocó destacarse desde el primer minuto del fenómeno del “Cine con Vecinos”, hace veinte años. En la pantalla grande hizo de padre protector, de abuelo comprensivo, de linyera soñador y hasta de “viejo cascarrabias”. Desde el comienzo, en las primeras telenovelas grabadas en Saladillo, Cacho se mostró interesado en participar como actor pero detestaba memorizar los parlamentos. Lo suyo era la impronta espontánea, tomaba la idea general y se lanzaba. Sufría mucho con los diálogos extensos. Y hasta amenazó con abandonar el intento en los primeros rodajes. “Esto no es para mí”, decía. Y se iba. Y al rato estaba de vuelta frente a las cámaras. Transitó por casi todas las obras audiovisuales gestadas en este movimiento cinematográfico saladillense que iniciamos hace dos décadas. Y demostró su compromiso cuando acompañaba los rodajes aunque no tuviera un papel protagónico ni secundario. Y hasta una vez nos dijo basta. Y lo homenajeamos en su “retiro de las tablas”. Recibió su plaqueta de reconocimiento en el Cine Marconi y su ingenuidad duró poco. Al poco tiempo lo citamos para participar en el film “Crisálidas”. Y como siempre decía: “no queda otro remedio”. Y regresó al ruedo de los rodajes. ¿“Che, y que hago con la placa?”, nos preguntaba cada tanto. Transparente y frontal como pocos. No había grises ni medias tintas con Cacho. Eso lo caracterizó como un ser muy especial. Eso hizo que lo amáramos, incluso con sus quejas, sus desplantes y protestas. Tipo exigente este “Cacho”. Pero de un corazón tremendamente grande. El año pasado protagonizó el cortometraje de ficción que hicimos para homenajear a René Regina. “Anótenme para el próximo”, bromeaba. Está claro que ya no lo veremos todas las mañanas en el bar frente a la plaza. Pero que linda ventaja es tenerlo registrado en casi veinte largometrajes y numerosas telenovelas filmadas en Saladillo. “Las estrellas son eternas, Cacho”. Y seguirás muy presente en nuestros corazones. Ya te extrañamos, pero con mucha dulzura. Gracias Cacho por tanto. Desde la Fundación Cine con Vecinos enviamos nuestro cariñoso saludo a su hija Adriana y a sus nietos Sebastián y Aldana (*).
Julio Midú y Fabio Junco
Fundación Cine con Vecinos
(*) CESPAZ informa que falleció a los 79 años de edad, DONATO ANTONIO MIGUEL SALINARDI (CACHO). Sus restos son velados en la sala «B» de CES PAZ. El sepelio será este martes 10 de febrero de 2015 a las 09:30, previo responso. Casa de duelo: Posadas 3521 – Saladillo